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Accidente en Explocen revela presunta intención de venderla a la empresa china Auxin Norbenco

LATACUNGA RURAL (I) | La explosión en un área aislada dentro de la fábrica Explocen mantiene con salud delicada al obrero Alfredo Chiliquinga. Él trabajaba en una máquina que elabora mecha lenta, según informó el jefe de la Policía Nacional de Latacunga, Edwin Andrade.

Por: Redacción www.Cotopaxinoticias.com (I)

Poaló – Latacunga y Saquisilí (Cotopaxi). El accidente se produjo alrededor de las 17:30 de este miércoles, 7 de febrero de 2018.

 

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El trabajador fue internado en el hospital del IESS de Cotopaxi y luego llevado al Andrade Marín, de Quito, por la gravedad de sus heridas. Tiene quemaduras en rostro, pecho y manos y cortaduras en el cuello, según informó Adrián Valverde, jefe del Cuerpo de Bomberos de Saquisilí.

Es la primera vez que sucede una explosión en esta fábrica, ubicada en la vía Saquisilí – Poaló y perteneciente a territorio poalense, parroquia rural del occidente de Latacunga. Así lo confirmaron Valverde; el jefe de Seguridad Industrial de la empresa, Patricio Cárdenas; y el secretario general del Sindicato de Trabajadores de Explocen, Freddy Caiza, a Cotopaxi Noticias este jueves.

Explocen tiene 40 años de existencia y es una empresa mixta, es decir de propiedad estatal y privada a la vez. El 60% pertenece al Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa) y el 40% a una empresa particular americana, según detalló Cárdenas. Al inicio esta fábrica pertenecía totalmente a las Fuerzas Armadas de Ecuador.

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Entre los productos que elabora Explocen, según aseveró Caiza, están explosivos para las actividades mineras. Los directivos de la empresa no atendieron la solicitud de entrevista de Cotopaxi Noticias.

El representante de los trabajadores sindicalizados sostiene que el accidente ocurrió por el actual nivel emocional de los obreros.

 

Aseguró que están preocupados porque el gerente general, Wilson Goyes, y el gerente de Operaciones, Fabián Chico, les comunicaron en reunión del lunes -según afirmó- que la empresa está por quebrar, que cambiará su giro de negocio al cultivo de brócoli y que la autorización para para la elaboración de explosivos los venderán a la empresa china Auxin Norbenco.

Es “una empresa china que tiene intereses millonarios en entrar al mercado (ecuatoriano) justo en el auge de la gran minería a gran escala”, dijo Caiza.

Detalló que -según lo que habrían anunciado los gerentes- los actuales obreros de Explocen pasarían a cultivar brócoli y la elaboración de explosivos ya no se realizaría en Poaló, sino que Auxin Norbenco montaría fábricas en Zamora Chinchipe y otras provincias donde actualmente se explotan minas.

Una prueba de que la venta va, según Caiza, es que los gerentes habrían anunciado que se tumbará el bosque de eucalipto que rodea a la fábrica y que según normas técnicas es necesario que se lo mantenga como medida de mitigación al impacto ambiental que ocasiona la elaboración de explosivos.

Cárdenas lo negó. “Hubo malos entendidos en la reunión que mantuvo el martes el señor gerente con los trabajadores (…) No se va a vender la empresa, sigue siendo el 60% del Issfa y el 40% de una empresa americana”, manifestó.

En la fábrica de Poaló laboran 60 obreros sindicalizados y 20 no agremiados, según señaló Caiza.

Los obreros sindicalizados suspendieron sus labores este jueves. Alrededor de las 08:00 se embarcaron en un bus y se dirigieron a Quito para visitar a su compañero en el hospital y realizar un plantón frente a la sede del Issfa.

La protesta busca impedir que se venda Explocen y la destitución de los gerentes general y de Operaciones, según enumeró el secretario del Sindicato.

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Caiza teme que al vender la fábrica los obreros se queden sin trabajo. Explicó que ellos saben elaborar explosivos, no cultivar brócoli.

Recordó que hace alrededor de cinco años los obreros se declararon en huelga debido a que en esa ocasión Explocen recortó personal. “Aducían que había bajado las ventas por la disminución de la actividad petrolera y minera”.

Anunció que, de no tener respuestas favorables a sus pedidos, el Sindicato organizarán otra huelga.

Mientras los obreros quieren que la fábrica no cierre, algunos moradores y el presidente de la Junta Parroquial de Poaló, Gonzalo Espín, piden que se la reubique en una zona despoblada.

 

Espín y varios vecinos aseguran que desde hace 10 años advertían el riesgo de una explosión. Sostienen que la actividad de Eplocem ponen en peligro a viviendas ubicadas en Poaló y Saquisilí. Así lo dijo la noche de este miércoles un morador que pidió la reserva de su nombre.

 

Espín recordó que hace 10 años la gente empezó a protestar porque Explocen realizaba pruebas de detonaciones detrás de su fábrica y que esa actividad ocasionó cuarteaduras en las paredes de las viviendas de algunos barrios aledaños.

El presidente de Poaló considera que se debe reabrir el debate sobre la reubicación de Explocen ahora que el Municipio de Latacunga pretende construir el nuevo camal en el terreno aledaño. Considera que la decisión está en manos del alcalde Patricio Sánchez.

Además, Espín y algunos vecinos resaltaron que, a diferencia de hace algunos años, son pocos los obreros oriundos de la zona y que la mayoría proviene de afuera. Caiza reconoció este aspecto, detalló que alrededor del 15% de obreros proviene de Poaló y sus alrededores y que el resto llega desde Pujilí o de otras partes de Latacunga e indicó que el obrero herido es del barrio poalense Pilligsillí.

“Los obreros que son de aquí (Poaló) tiene trabajos menores; los ingenieros y otros trabajadores son de afuera”, comentó Espín.

El Jefe del Cuerpo de Bomberos de Saquisilí explico que para determinar si Explocen es una amenaza para los alrededores se debe inspeccionar la fábrica, que esas inspecciones se la realiza antes de renovar el permiso de funcionamiento, pero que ese proceso lo realizan los bomberos de Latacunga por ser jurisdicción de este cantón. “A lo que nosotros sí nos han pedido es que vayamos a dar charlas de seguridad sobre manejo de extintores, mangueras…”, informó.

 

Sin embargo, Valverde destacó que este miércoles, cuando ingresó luego de la explosión, constató que la fábrica cumplía normas de seguridad. Detalló que las áreas de trabajo tienen espaldones que las aísla entre sí y que impiden explosiones en cadena.

Resaltó que la emergencia del miércoles fue controlada por los propios obreros antes de que lleguen los bomberos.

Los obreros “desactivaron el fluido eléctrico como indica los protocolos de seguridad (…) manejaron los extintores, sacaron el resto de materiales inflamables (para evitar que el percance se agrande). No hubo afectación en otras zonas de la fábrica o alrededores de la empresa. Al momento de retirarnos, se dejó todo el área fuera de peligro”, informó.

Incluso, fueron los obreros quienes sacaron al herido y lo estaban trasladando al hospital en un vehículo de la empresa. Cuando los bomberos llegaban se lo pasó a la ambulancia.

En el sitio donde se produjo la explosión laboraban cuatro obreros, cada uno en una máquina. Los paramédicos del Cuerpo de Bomberos de Saquisilí dio primeros auxilios a todos, pero se constató que tres estaban ilesos, según informó Valverde.

Algunos de estos detalles los habían conocido ya y los comentaban varios habitantes del lugar mientras viajaban entre Poaló y la feria de Saquisilí en las camionetas de transporte público que cruzan frente a la fábrica. El miércoles también lo contó Carmela Camalle. “Si se sintió la explosión”, fue la frase más repetida.

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